Juan Diego Flórez
Juan Diego Flórez nació en Lima el 13 de enero de 1973. Su padre, Rubén Flórez, fue cantante de música peruana e intérprete, sobre todo, de los valses criollos de la compositora Chabuca Granda. De él, no sólo heredó la voz, sino también el amor por la música peruana y latinoamericana. Su madre, María Teresa, amante también de esta música, fue el motor detrás de Juan Diego, alentándolo a perseverar en sus estudios musicales y a mantener firmes sus objetivos.
En sus inicios, Juan Diego se dedicó al pop, al rock y a la música peruana. Componía sus propias canciones y organizaba recitales en piano-bares del distrito limeño de Barranco, los cuales rebosaban de chicos y chicas de su colegio. En 1989, el joven cantante ganó el Primer Festival de la Canción por la Paz, que fue transmitido por televisión en todo el Perú.
Juan Diego siempre fue de la idea de que para ser un buen músico, incluso de música popular, era necesario saber leer y escribir música. Por ello, luego de haber frecuentado algunas academias y de haber tomado las primeras lecciones de canto, ingresó en el Conservatorio Nacional de Música en 1990. El futuro tenor no había decidido aún dedicarse a la música clásica por completo. No obstante, sus experiencias musicales durante el primer año de conservatorio se encargarían de definir su vocación. Poco después de su ingreso en el conservatorio, Juan Diego comenzó a tomar clases de canto con Andrés Santa María, director del Coro Nacional, del cual pasaría a formar parte. La importancia del Coro Nacional en el desarrollo musical del tenor fue decisiva. Allí pudo vivir como artista la invalorable experiencia de interpretar a los más grandes compositores a un nivel profesional. No cabía esperar un mejor comienzo.
Con ganas de conocer el mundo y de recibir una educación superior, Juan Diego consiguió una beca para estudiar en el prestigioso Curtis Institute de Filadelfia. Allí estudió de 1993 a 1996, y tuvo la fortuna de interpretar varias óperas completas escenificadas y con orquesta, lo cual le dio una base que le serviría más adelante, en los albores de su espectacular carrera.
En 1994, Juan Diego conoció al tenor peruano Ernesto Palacio en Lima. Este encuentro le cambiaría la vida. Juan Diego audicionó para Palacio, quien al parecer no se mostró muy impresionado. Sin embargo, Palacio le ofreció ayudarlo a emprender una carrera, y lo invitó a grabar un disco con él en el Festival de Gerace, Italia (Il Tutore Burlato, de Martín y Soler).
Juan Diego visitó Italia en otras ocasiones, como en 1995, con motivo de la grabación de su segundo disco con Palacio (Le Tre ore dell’Agonia, de Zingarelli).
Los consejos vocales de Palacio surtieron un efecto inmediato en el tenor. De manera notoria, Juan Diego había empezado a cantar con más facilidad y expresividad. En el Curtis Institute no tardaron en constatar y aprobar la buena influencia de Palacio. La voz de Juan Diego poseía características innatas, como la flexibilidad y la facilidad para los agudos, que la destinaban al repertorio belcantista y, sobre todo, a las óperas de Rossini. Palacio se dio cuenta de ello inmediatamente, y guió a Juan Diego hacia ese repertorio.
En 1996, Juan Diego hizo una audición en Bolonia para el Rossini Opera Festival de Pésaro, tras la cual el Director Artístico no dudó en darle un pequeño papel en la ópera Ricciardo e Zoraide, que no llegaría a interpretar, pues lo que pasó más adelante, catapultó su carrera al firmamento de los grandes teatros del mundo entero.
Era el verano de 1996. Juan Diego se encontraba ya en Pesaro ensayando Ricciardo e Zoraide en el Rossini Opera Festival. Poco antes de la apertura del Festival, el tenor principal de la ópera Matilde di Shabran, intérprete del rol de Corradino, canceló por enfermedad. El Festival buscaba desesperadamente a un sustituto a la altura, pero no le resultaba nada fácil, ya que se trataba de una ópera prácticamente desconocida, faltaban pocos días para el estreno, y era un rol muy difícil vocalmente. Fue entonces cuando el Director Artístico Luigi Ferrari ofreció el papel a un jovensísimo Juan Diego de 23 años. El tenor quiso aceptarlo de inmediato, pero demostrando profesionalidad, pidió primero a Ferrari que le diera un poco de tiempo para revisar la partitura durante el almuerzo, tras el cual le diría si aceptaba o no. Juan Diego, electrizado, apenas almorzó; revisó sólo dos páginas de la partitura, se dirigió a Ferrari y le dijo que sí.
Se puso en marcha, en el acto, toda una maquinaria para preparar en pocos días a Juan Diego para el estreno. El joven tenor ensayaba las escenas sin conocer aún la música que le correspondía cantar: ayudantes y pianistas se la iban sugiriendo. Fueron días frenéticos. Pero por fin llegó el tan esperado estreno el día 13 de agosto de 1996. El éxito fue enorme.
Tal fue el inicio de una carrera estelar.
A partir de ese momento, diversos teatros del mundo fijaron su atención en el jóven tenor. Entre ellos, el templo de la lírica por excelencia: La Scala de Milán.
Juan Diego debutó en La Scala el 7 de diciembre de 1996, fecha emblemática que inaugura la temporada, bajo la célebre batuta de Riccardo Muti, quien ejercería una gran influencia en el tenor durante los primeros años de su carrera. Juan Diego había visitado el Teatro Alla Scala meses antes ; y contemplando el bello auditorio desde un palco, dijo premonitoriamente: "Aquí cantaré dentro de 10 años". No podía imaginarse que esos 10 años se convertirían en 10 meses.
Desde entonces, Juan Diego ha cantado en los principales teatros y salas de concierto del mundo, como el Metropolitan Opera de Nueva York, Lyric Opera de Chicago, Ópera de Los Ángeles, Ópera de San Francisco, Ópera Nacional de Washington, Royal Opera House de Londres (Covent Garden), El Festival de Wexford, Staatsoper de Viena, Festival de Salzburgo, Konzerthaus de Viena, Musikverein de Viena, Ópera de París, Festival de Radio France de Montpellier, Théâtre du Capitole de Toulouse, Théâtre de Champs-Élysées de París, Théâtre du Châtelet de París, Ópera de Lyon, Teatro Real de Madrid, Teatro Liceo de Barcelona, Abao de Bilbao, La Maestranza de Sevilla, Las Palmas de Gran Canaria, Teatro São Carlos de Lisboa, La Scala de Milán, Rossini Opera Festival de Pésaro, Academia de Santa Cecilia en Roma, Teatro San Carlo de Nápoles, Teatro Regio de Turín, Teatro Verdi de Trieste, Teatro Comunale de Bologna, Ópera de Roma, Teatro Massimo de Palermo, Teatro del Maggio Musicale Fiorentino de Florencia, Teatro Carlo Felice de Génova, Teatro Filarmónico de Verona, Staatsoper de Múnich, Deutsche Oper de Berlín, Staatsoper de Dresde, Opernhaus de Zúrich, etc.
Su repertorio incluye 32 óperas:
I Capuleti e i Montecchi, La Sonnambula y I Puritani de Bellini; Alahor in Granata, Don Pasquale, Elisabetta, L’Elisir d’Amore, La Fille du Régiment y Maria Stuarda de Donizetti; Armide y Orfeo de Gluck; La Viuda Alegre de Lehar; Il Tutore Burlato de Martín y Soler; L’Etoile du Nord de Mayerbeer; Mitridate de Mozart; Nina ossia la Pazza per Amore de Paisiello; Gianni Schicchi de Puccini; Adelaide de Borgogna, Il Barbiere di Siviglia, La Cenerentola, Le Comte Ory, L’Italiana in Algeri, Matilde di Shabran, Otello, Semiramide, Il Signor Bruschino, Il Viaggio a Reims y Zelmira de Rossini; Il Cappello di Paglia de Firenze de Rota; Fledermaus de J. Strauss; Falstaff y Rigoletto de Verdi.
Ha colaborado con directores de orquesta de fama mundial, como Roberto Abbado, Yves Abel, Riccardo Chailly, Myung-Wun Chung, Gustavo Dudamel, Daniele Gatti, John Elliot Gardiner, Gianluigi Gelmetti, James Levine, Jesús López-Cobos, Neville Marriner, Riccardo Muti, Antonio Pappano, Carlo Rizzi, Christophe Rousset, Nello Santi, Marcello Viotti, Alberto Zedda.
Juan Diego mantiene una relación estrecha con su país, que lo ha premiado con la distinción más alta otorgada por el Gobierno: la Órden El Sol del Perú en el grado de Gran Cruz.
Juan Diego ha creado una fundación en Perú que tiene como objetivo fomentar la creación de orquestas y coros infantiles y juveniles a nivel nacional. El proyecto se inspira en el Sistema de Orquestas venezolano, y tiene como finalidad principal rescatar a niños y jóvenes pertenecientes a los sectores más vulnerables de la población, de los peligros de la mala vida: drogas, delincuencia, explotación y prostitución infantil, etc.
El 5 de abril de 2008 Juan Diego y Julia Trappe se casaron en la Catedral de Lima en una ceremonia oficiada por el Cardenal Juan Luis Cipriani. El matrimonio fue un acontecimiento nacional y la ciudadanía se volcó en masa a la Plaza Mayor para estar cerca de la pareja. La cermonia fue transmitida por televisión en directo.
Desde el 2001 Juan Diego es artista exclusivo de la Decca Records, con la cual ha grabado 8 discos como solista, 4 óperas completas en CD, y 6 óperas completas en DVD. En total, incluyendo grabaciones con otros sellos discográficos, Juan Diego ha grabado 8 CD’s como solista, 12 óperas completas en CD, 11 óperas completas en DVD y 7 discos pertenecientes a otras categorías como cantatas u oratorios. Sus grabaciones han ganado numerosos premios, como el Choc de la revista Le Monde de la Musique, el Diapason d’Or, el Echo Klassik Preis, el Cannes Classical Award, el Gramophone Award y la nominación al Grammy por el CD Bel Canto Spectacular.
En 2007, en el teatro Alla Scala, Juan Diego concedió el bis del aria A mes amis de la ópera de Donizetti La Fille du Régiment, célebre por los nueve dos de pecho, ante un público enloquecido, rompiendo así el veto de repetir arias, vigente desde 1933. Posteriormente en 2008, Juan Diego repitió la misma hazaña en el Met, tras varios años en los que un aria no se repetía.
Juan Diego ha recibido numeroso premios como el Rossini d’Oro, el premio Abbiati de la crítica italiana, el Tiberini d’Oro, el ISO de Oro, L’Opera Award, el Aureliano Pertile, el premio Bellini, el Francesco Tamagno, y el Plácido Domingo Award.
También ha sido distinguido con las siguientes condecoraciones:
2002 - Visitante Ilustre de la Universidad Nacional de Ingeniería (Perú)
2003 - Miembro Honorario del Claustro de la Universidad del Pacífico (Perú)
2004 - Órden al Mérito en el grado de Gran Cruz (Perú)
2004 – Profesor Honorario de la Universidad San Martín de Porres (Perú)
2005 - Profesor Honorario del Conservatorio Nacional de Música (Perú)
2007 - El Sol del Perú en el grado de Gran Cruz (Perú)
2009 - Profesor Honorario de la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (Perú)
En 2007, La Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas del Perú editó un libro sobre la trayectoria de Juan Diego, escrito por Gustavo Rodríguez. Asimismo, en 2004, Serpost (Servicios Postales del Perú) lo honró editando un sello postal en su honor.
En 2006, Juan Diego obtuvo la ciudadanía austriaca por méritos artísticos sin haber dejado de ser ciudadano peruano.
Juan Diego es partner de Audi y su entrevista apareció en el Annual Report del 2008.
Asimismo es parte del proyecto Zegna and Music como embajador musical de Ermenegildo Zegna.
Entre sus hobbies podemos mencionar el fútbol, el tenis, la cocina y la composición. Juan Diego ha compuesto dos piezas peruanas denominadas “Huaynos”, el primero es el “Huayno Peruano Navideño” y fue ejecutado en Viena por la Sinfónica de la Radio de Viena y los Niños Cantores de Viena en 2007 en el Konzerthaus. El Segundo, “Santo”, fue compuesto para el disco del mismo título en 2009.
(Fuente: http://www.juandiegoflorez.com)